Los lubricantes nos ayudan facilitar la penetración haciéndola más sencilla y placentera. Existen de varios tipos pero los podemos diferenciar en 2 grandes grupos, los de base de agua y los de lubricantes de silicona. Los lubricantes de base de agua son ideales para zonas sensibles o personas que sufre de irritación con facilidad hay algunos que incluso imitan el PH de la zona a aplicar, la piel los absorbe fácilmente, son los que se deben utilizar si haces un uso diario de ellos, tanto anal como vaginal que no necesitan excesiva dilatación. El lubricante a base de silicona es más duraderos y resbaladizos ya que se absorbe más lentamente por lo que con una pequeña cantidad es suficiente, el tacto es más sedoso y sensual, suelen ser utilizados para el sexo anal, fisting o juguetes de tamaño XL, tanto para el fisting como para utilizar juguetes sexuales grandes hay que ser generoso con la cantidad aplicada.